Una mirada sucinta del devenir histórico y cultural de Reynosa, desde la antigüedad hasta el presente, basada en profesional investigación historiográfica con interesantes fotografías e inédita iconografía del valioso patrimonio cultural de esta gran ciudad, cuyo nombre se origina en el linaje de su pasado. Edición Especial Cultural Conmemorativa del R. Ayuntamiento a los 250 años de la Fundación del Nuevo Santander, hoy Tamaulipas.

Lic. Oscar Luebbert Gutiérrez

Me congratula brindar a los lectores esta importante obra, de elaboración paciente y cuidadosa, de profunda búsqueda en múltiples fuentes documentales e iconográficas, muchas de ellas nunca antes referidas o publicadas, y apoyada en la interpretación rigurosa de las mismas, pero expuesta de manera clara, de tal modo que también tenga un valor didáctico que estimule el interés y el estudio, aunados a la participación creativa en la forja cotidiana de nuestra gran ciudad. Quiero hacer un reconocimiento a quienes participaron en la compleja elaboración de este libro, y desear que sus páginas alienten el sentido de arraigo, pertenencia e identidad que el Ayuntamiento de Reynosa promueve para fortalecer la cultura local en el mosaico pluricultural de México.
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16. Perturbación extranjera en el Norte de México


U na de las herencias más pesadas que recibió México de su pasado colonial fue la amenaza del expansionismo de los Estados Unidos, que desde el principio del siglo XIX codició los territorios septentrionales del imperio español. Este nuevo país, que emergió de las llamadasImagen soldado lancero mexicano Trece Colonias inglesas en el Nuevo Mundo, tuvo varias ventajas iniciales a su favor, como fue haber experimentado una corta guerra de emancipación y recibir el reconocimiento como nación libre y soberana al poco tiempo por parte de su antigua metrópoli al tiempo que Europa se veía envuelta en severos conflictos bélicos y revoluciones políticas.
Ello le proporcionó tiempo para probar sin interferencias su sistema de gobierno republicano y federal, adquiriendo pronto seguridad en sí mismo y aún la posibilidad de expandirse al Oeste de los Montes Apalaches, gracias al rápido incremento demográfico, estimulado por la creciente migración europea. Esta dinámica se fortaleció con la adquisición de la Luisiana de manos de Napoleón en 1804 y después obtuvo la península de la Florida, que España fue incapaz de conservar, siendo forzada además a firmar un tratado de límites con los Estados Unidos en 1819, General Mier y Teran que fijó como linderos el río Sabinas, lo que permitió a los colonos angloamericanos penetrar a Texas con la tolerancia de las autoridades novohispanas, tal como lo hizo Samuel Austin y su hijo Esteban, sembrando la semilla del separatismo que más tarde a México le tocó cosechar.
Imagen soldado mexicano siglo XIX La Nueva España, por el contrario, había sufrido en las postrimerías coloniales de severos controles fiscales por parte de su metrópoli que descapitalizaron a sus fuerzas productivas, sufriendo una larga y sangrienta guerra insurgente que acabó por arruinar su sistema económico. En el contexto mundial, la independencia de México coincidió con una paz europea que motivó a España a intentar la reconquista, como lo hizo en 1829. Esta nueva nación también fue presa del emergente capitalismo mercantil atraído por la fama de la plata mexicana, estableciendo enclaves económicos que se convirtieron en poderosos factores de influencia sobre la política interna de México en las primeras décadas de la vida independiente.
Mapa de Texas tiempos independencia colonos angloamericanos
A los problemas de orden nacional, en el norte de México se sumaban la escasa densidad de la población, el raquítico incentivo al desarrollo económico y el terrible flagelo de los indios de las praderías. Era tan poca la articulación de estas áreas periféricas con el núcleo del país que el gobierno nacional organizó una Comisión de Límites en 1828 para recabar información sobre la frontera septentrional, a cargo del general Manuel Mier y Terán, quien se alarmó por los numerosos colonos extranjeros radicados ya en Texas, superando a la población nativa, y que tarde o temprano, como pronosticó, se convertirán en un conflicto a la soberanía nacional.
En un intento para retener la provincia, Terán instaló guarniciones, pero estas se desintegraron por los conflictos políticos de 1832-33.
Imagen cañon de campaña La independencia de Texas finalmente ocurrió en 1835, al tomar como pretexto los colonos angloamericanos la implantación de la República Central, cuando ellos habían recibido sus primeras mercedes de tierras del gobierno absolutista español, así como grandes concesiones del gobierno de México, como la tolerancia a la esclavitud de los negros, General Antonio Lopez de Santa Annala exención de impuestos y otras franquicias. Lamentablemente y luego de una pésima campaña militar, el presidente Antonio López de Santa Anna fue derrotado por Samuel Houston a orillas del río San Jacinto y para salvar la vida firmó un deshonroso e ilegal tratado que los texanos aprovecharon como argumento para reclamar límite al río Bravo y que a partir de 1845 se convirtió en el Casus belli que esgrimió Estados Unidos para iniciar su guerra de intervención contra México.